Todos desean tener un sistema de salud eficiente que elimine las molestias de cualquier enfermedad. Anhelamos la medicina exponencial porque facilita el acceso a la salud, a curar con precisión y rapidez sin
dañar lo sano, órganos de reemplazo, válvulas que mejoren el flujo sanguíneo, córneas que permitan recuperar la visión y, así, una solución para cada una de las enfermedades que hoy padecemos.
Los cuestionamientos de sus posibles implicaciones negativas quedan fuera de la discusión. La promesa de tener formas de curar todas las enfermedades provoca entusiasmo y la expectativa de que la vida puede ser mejor, sin dolor, sin muertes injustas, inesperadas o fuera de tiempo, da esperanza; sin em- bargo, imaginar que esto puede aumentar los años de vida crea inquietudes, incertidumbre y hasta rechazo, ya que en general se quiere tener una vida plena y sana, pero finita.
No estamos preparados emocionalmente para la longevidad y estar libre de toda enfermedad es difícil de aceptar. Sobre todo, porque no es un deseo individual, sino para toda la familia.
Implicaciones en el mercado
• Comercialización de los desarrollos como la impresión 3D para órganos, células madre personalizadas, diagnóstico de laboratorio en un chip en el punto de atención, bioinformática a gran escala, biología sintética, genómica de bajo costo, edición de genes. La medicina que cura lo incurable al alcance de todos.
• Cambio en el ecosistema de atención médica: desde dispositivos médicos, software y aplicaciones móviles, nuevos medicamentos y enfoques terapéuticos, hasta la utilización de big data, inteligencia artificial, registros médicos electrónicos, nanorrobótica, etcétera.
• Surgen dispositivos con inteligencia artificial como básculas, brazaletes de presión arterial o glucómetros, y otros que diseñan la dieta, la actividad física o controlan el azúcar en la sangre.
• Todo tipo de cuidados para la tercera y cuarta edad invaden los mercados, no sólo por los usuarios actuales, sino por los previsores del futuro.
Implicaciones en el entorno social
• Se vive una gerascofobia (miedo a envejecer) anticipada, se experimenta un miedo exacerbado a la pérdida de la apariencia, a la inactividad y a la reducción de capacidades o habilidades.
• La secuencia de ADN será parte de los estudios básicos de todas las personas para la medicina de exactitud.
• La guerra de patentes detiene el desarrollo de soluciones ya diseñadas para diagnósticos tempranos que pueden evitar muertes, por lo que los gobiernos deben tomar decisiones.
• Los seguros de gastos médicos se niegan a pagar por medicamentos experimentales y pueden quedar fuera del mercado.
• Por ley, en todo hogar debe haber variedad de objetos domésticos en red que rastrean e informan sobre la salud. También en el mobiliario urbano y en lugares públicos como cines y teatros.
Implicaciones en los consumidores
• Todos quieren ser partícipes de una vida sin enfermedad ni dolor.
• Todos los consumidores desearán conocer su ADN para programar sus artículos domésticos, como un inodoro que recomiende mejoras para mantener una buena salud.
• Se buscará que los médicos especialistas cuenten con sistemas de inteligencia artificial sofisticados, capaces de combinar todas las interacciones causa-efecto conocidas de los factores de salud de su paciente, así como los medicamentos actuales, los signos vitales, la genética, etcétera.
Narrativas
• Ya no importa poner en riesgo alguna parte del cuerpo y hasta la vida; se asume que gracias a la ciencia retornará.
• Más elementos en los hogares tendrán sensores que midan la salud de nuestros cuerpos y el medio ambiente, desde el seguimiento por wifi de signos vitales hasta la incorporación de datos como el clima o el conteo de polen, o incluso los brotes de influenza en el vecindario.
• Habrá programas de coaching al alcance de todos en cualquier dispositivo en temas de dieta y nutrición que llegan incluso a recordarte que tomes tus medicamentos u ofrezcan apoyo psicológico o seguimientos especiales.
• Acostumbrarse a estar sano puede provocar enfermedades mentales debido al tiempo libre del que se dispone.